Albert Cogul, primer europeo con paraplejía en subir hasta el campamento base del Everest. Enhorabuena

Citius, Altius, Fortius” lema olímpico pronunciado por Pierre de Coubertin en la inauguración de los primeros Juegos Olímpicos de la Edad Moderna en 1896 (Atenas), que muy bien se puede aplicar al gran Albert Cogul, un leridano de adopción que todos los días nos demuestra desde su silla de ruedas su capacidad de resilencia y de alcanzar nuevos retos vitales.

Albert no nos deja de sorprender y demostrar que la determinación y la voluntad de hacer es el camino de la superación y, por supuesto, tener la empatía y visión para conseguir involucrar a sus desafíos vitales a un gran número de gente.

Ahora este referente de deportista en silla de ruedas nos ha sorprendido a todos llegando al “Cim”; se puede ir más lejos, pero más alto parece ya imposible. Nada menos, Albert se ha convertido en la primera persona en silla de ruedas en subir hasta el campamento base del Everest, la montaña más alta del mundo, situado a 5364 metros de altitud, que se dice pronto .

Una verdadera hazaña que convierte a este “trotamundos” en el primer europeo con paraplejía en conseguir este hito. Sin duda, todo un ejemplo de voluntad y resiliencia. Albert no ha estado solo en este hito, que ha dispuesto de un equipo de más de 30 personas indispensables para superar este reto titánico, entre otros sus dos hijos y los ocho portadores locales que le acompañaron durante todo el trayecto, sin los que no habría sido posible este hito histórico
Este martes, el deportista leridano con movilidad reducida Albert Cogul culminó con éxito un hito histórico impulsado por la Fundación Sportium en el marco del CIM Project. Si el deporte es un ejemplo de compromiso y de trabajo en equipo esta nueva aventura de Albert es un buen ejemplo de esta máxima deportiva, ya que todo el equipo tuvo un papel fundamental para que Cogul pudiera atravesar los pasos más difíciles de la ascensión en su silla de ruedas, de un modelo especial llamado Joëllete.

Este viaje a Itaca, comenzó el 1 de noviembre saliendo de Barcelona hasta llegar a Lukla, donde el grupo inició el camino hacia el campamento base. Allí empezaron siete etapas, divididas en nueve días y más de treinta de trekking, para alcanzar el Campo Base del Everest. Un reto que trascede a la misma hazaña deportiva y que se convierte en un ejemplo de superación y resiliencia, que viniendo de Albert nos sorprende un poco menos, ya que nos tiene “acostumbrados” a ver cómo día a día se supera haciendo de la suya vida una verdadera aventura vital incluso desde una silla de ruedas.
Cogul nació en Barcelona, ​​pero se estableció en Lleida en 1991. En 2016 quedó parapléjico en un accidente de parapente y desde entonces ha recorrido más de 40 países en cuatro continentes, explorando el mundo y practicando deportes extremos de todo tipo .

Albert nuestra más sincera enhorabuena y reconocimiento

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